La tierra del Maestrazgo recibe su nombre de la Orden del Temple. Ellos eligieron el Maestrazgo, entre otros motivos, por su riqueza interior. Grandes conocedores de la energía de la Tierra decidieron asentarse en este enclave por la abundancia de agua en el subsuelo y por la fuerza telúrica que emana de ella.
Su legado está presente en nosotros. Ellos eran conocedores de la importancia de la energía de la Tierra y el Cosmos. Tenían su propio simbolismo y rituales y, en secreto, servían a la Gran Madre.
Es una tierra muy antigua, en la que se puede ver la evolución del planeta y la vida en la Tierra durante los últimos 200 millones de años, sus paisajes son el reflejo de ello. Sus potentes montañas, los bosques salvajes, sus ríos puros con cascadas que te cambian la energía, la tierra roja, el aire puro y el viento son grandes maestros que te muestran muchas cosas cuando los escuchas desde el silencio que también te acompaña en estas tierras.
